Título: La Espada del Destino (Saga Geralt
de Rivia).
Autor: Andrzej Sapkowski.
Género: Baja Fantasía
Editorial: Alamut
Páginas: 288
Geralt sigue con sus trabajos de brujo,
donde encontrará nuevas aventuras y nuevos seres que en muchos casos se
consideran extintos o directamente inexistentes. De nuevo, se enfrenta a
situaciones en las que su código tendrá que darle las respuestas a los dilemas
morales… pero su código no lo contempla todo, especialmente si hablamos de su
tortuosa relación con la hechicera Yennefer.
Esta vez, Sapkowsky perfila su estilo. Su
narrativa, sin dejar de ser concisa, atrayente y ligera, gana en belleza y
brillantez. Este autor juega con las palabras, desgranándolas y ofreciéndolas
en la justa medida para que comprendamos y, a un tiempo, lo imaginemos todo.
En este segundo libro, más estructurado,
se nos desvelan muchas cosas sobre el carácter de protagonista - que, insisto,
es tremendamente contradictorio y, añado, también inseguro – y su manera de ver
y afrontar las cosas. Salen varios personajes especialmente interesantes que,
más que otra cosa, ponen en evidencia las inclinaciones y reflexiones de
Geralt.
Respecto a la trama, empieza a
consolidarse, trenzándose suavemente de manera que comenzamos a verla como algo
más real que nos deja una sensación de continuidad. Hasta las últimas páginas
nos está reservando el autor pequeñas sorpresas, algunas de ellas absolutamente
inesperadas.
Empiezo a comprender las elogiosas
críticas que Sapkowsky ha estado recibiendo y me rindo a la evidencia de que
este segundo tomo es un diamante en bruto, un relato que juega con los
sentimientos y los deseos del lector impulsando su imaginación con un estilo
realmente peculiar y precioso.
Si ya recomendaba el tomo anterior, con
más razón recomiendo este segundo. Y recomiendo cuidado… ¡Esta saga puede
resultar adictiva!
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